“Que tu alimento sea tu medicina y tu medicina sea tu alimento”. Este aforismo atribuido según las fuentes clásicas a Hipócrates, padre de la Medicina, hace más de 2.400 años está absolutamente vigente en la actualidad. Existe un consenso general que defiende la alimentación variada y equilibrada como uno de los pilares en los que se sustenta el bienestar personal.

Patrones internacionalmente aceptados como la Dieta Mediterránea son un ejemplo idóneo para explicar en qué consiste esa alimentación equilibrada, con presencia proporcional de todos los nutrientes necesarios. Y precisamente en esa Dieta Mediterránea se incluyen alimentos ricos en proteínas, vitaminas, calcio, fósforo, magnesio, hierro y ácido fólico como el jamón de bellota 100% ibérico Cinco Jotas.

Beneficios del jamón ibérico saludable

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El perfil nutritivamente beneficioso del jamón Cinco Jotas tiene el refrendo científico internacional de la revista Food Science & Nutrition, que publicó el estudio científico liderado por el doctor Emilio Márquez Contreras del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, y presentado en 2018 en el Congreso Nacional de Hipertensión celebrado en Zaragoza.

El objetivo de esta investigación ha sido evaluar el impacto que el consumo moderado de jamón de bellota 100% ibérico Cinco Jotas tenía en la salud cardiovascular en general y en los parámetros de lípidos, presión arterial, peso y circunferencia de cintura. Los resultados permiten afirmar que el consumo de jamón de bellota 100% ibérico Cinco Jotas en una dosis de 40 gramos diario es recomendable para la población en general, ya que no incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y tiene además efectos favorables sobre diferentes lípidos y ácido úrico.

Propiedades nutricionales del jamón

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A continuación resumimos algunos de los beneficios nutricionales que se derivan del consumo de jamón ibérico Cinco Jotas:

1. Mejora los índices del conocido como el colesterol bueno lo que ayuda a un correcto funcionamiento del corazón y a evitar lesiones cardiovasculares. No sólo no incrementa el riesgo cardiovascular, sino que eleva considerablemente el cHDL (el llamado colesterol bueno) y reduce los niveles de cLDL (el llamado colesterol malo) y triglicéridos. La reducción producida del colesterol malo se traduce en una reducción del riesgo cardiovascular de entre un 10% y 15%. En el estudio se observó una reducción de 10 mg del cLDL, aumentando en 6 mg el cHDL.

2. No modifica la tensión arterial. Durante los 18 meses que duró el estudio, los cien pacientes que consumieron 40 g diarios de Cinco Jotas no experimentaron problemas en su tensión arterial.

3. El estudio realizado por el hospital mencionado corrobora que una ración diaria de jamón Cinco Jotas no conlleva una subida de peso ni aumento del perímetro abdominal.

4. Reduce la concentración del ácido úrico sanguíneo

Según se deduce del estudio, el jamón Cinco Jotas suministrado a los participantes en el estudio es rico en vitaminas, especialmente de las del tipo B, y minerales, algunos de ellos escasos en la dieta española como el fósforo, zinc o selenio. Se corrobora así que el jamón Cinco Jotas es fuente de 9 nutrientes y de 35 declaraciones de propiedades saludables autorizadas según reglamento europeo (432-2012) relacionados con el corazón, sistemas inmunológico y nervioso, huesos, dientes, glóbulos rojos, memoria, metabolismo…

Un producto ligado a la tradición de la gastronomía española, elaborado de manera sostenible, ligado a la conservación de la raza pura de cerdo 100% ibérico y de su ecosistema natural, la dehesa, y con un sabor que conmueve los sentidos. Además de todo esto, el jamón Cinco Jotas tiene un perfil nutricional que encaja a la perfección en el patrón saludable de la Dieta Mediterránea y sus recetas.

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